6 de febrero de 2006

OCHENTA AÑOS

Aparcó sus ochenta años
tras la ventana perlada de aliento
una fría tarde de domingo
los vio huir deprisa
liberados
de vuelta a la vida
sus fragmentados recuerdos
giraron sin orden
en un tiovivo de sueños
dentro de su cabeza diminuta
sus tres hijos con batas y carteras
entre risas y empujones
peleándose por abrazarla
su marido ya sin imagen apenas
ella tan enamorada
el día de su boda
dos nietos que vio apenas
en su última salida
y cuyos nombres no lograba recordar
repentinamente
sus ojos volvieron a ahogarse
en la soledad de su habitación
el coche repleto de ilusiones
desapareció engullido
en su propio tiempo
entre sollozos
muy lentamente
se dejó caer en la cama
absolutamente sola.

12 comentarios:

  1. Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.

    ResponderEliminar
  2. A veces la soledad escogida es la mas sola de todas.
    Besos acompañados de sal y azucar.

    ResponderEliminar
  3. Jo, que poema mas hermoso y más triste...*

    ResponderEliminar
  4. Yo no habría tenido fuerza suficiente para terminar este poema, es la dura realidad para muchos y es difícil plantarle cara.

    ResponderEliminar
  5. Hermosas palabras...
    Es un inmenso placer visitar cada dia tu Blog.

    Mil Besos!

    ResponderEliminar
  6. palabras hermosas para una trizte agonía....

    saludos cordiales
    vladimir urrutia

    te invito a visitar mi blog

    www.vladimirurrutia.blogspot.com

    ResponderEliminar
  7. Sola es como caigo generalmente...Pese a todo trato de levantarme, si no lo hago yo... quien mas.

    ResponderEliminar
  8. soledad que se antoja mas fria, cuando se está rodeado de gente y con las manos vacías.... de sensaciones...
    Bello texto, TORO...
    un beso

    ResponderEliminar
  9. La soledad de los caidos; que necio somos.
    Precioso y desgarrador

    ResponderEliminar
  10. Qué asco me da la gente a veces.

    ResponderEliminar